¿Quién es una trabajadora de hogar?
¿Quién es un empleador?
¿Están las trabajadoras de hogar protegidas por las leyes laborales en los Estados Unidos?
¿Qué diferencia hay entre una Carta Nacional de Derechos de las Trabajadoras del Hogar y una Carta de Derechos estatal o municipal?
¿Cómo puedo obtener más información sobre los derechos de las trabajadoras de hogar?
Una trabajadora de hogar es una persona que provee servicios dentro un hogar privado. Las trabajadoras de hogar son las niñeras/proveedoras de cuidado infantil que nutren y crían a nuestros niños, las trabajadoras de limpieza que traen orden a nuestros hogares, y las cuidadoras de atención directa que aseguran que nuestros seres queridos, nuestros adultos mayores o que viven con alguna discapacidad reciban la asistencia que necesitan para vivir con dignidad e independencia en sus hogares.
Hay aproximadamente 2.2 millones de trabajadoras de hogar en los Estados Unidos y el 91.5% de estas trabajadoras son mujeres, la mayoría de las cuales son inmigrantes y mujeres de color.
Las trabajadoras de hogar juegan un papel de suma importancia en apoyar el buen funcionamiento de un hogar ocupándose de tareas esenciales como el cuidado de niños pequeños y seres queridos de la tercera edad o discapacitados y el mantenimiento de un entorno vital limpio y organizado.
Un empleador del trabajo de hogar es una persona o familia que contrata y emplea a una trabajadora de hogar a tiempo completo o parcial (incluso una vez a la semana o una vez al mes; cualquier período de tiempo cuenta) para realizar diversas tareas y servicios de hogar en su domicilio particular, como limpiar, cocinar y ayudar a bañar, vestir, pasear, ir al baño y comer a miembros del hogar.
El empleador es responsable de proporcionar las herramientas, los recursos y la compensación necesarios para el trabajo de las trabajadoras de hogar. Para más información, puede consultar nuestra información de empleadores y visitar a nuestro colaborador, Hand in Hand: The Domestic Employers Network [Mano a Mano: Red de Empleadores de Trabajadoras de Hogar], por Internet.
La Ley de Normas Justas de Trabajo (FLSA, por sus siglas en inglés): promulgada en 1938 durante la Gran Depresión, esta ley estableció normas laborales y protegía los derechos de los trabajadores en Estados Unidos. Sin embargo, excluía a ciertos grupos, entre ellos las trabajadoras de hogar, debido a las desigualdades históricas raciales y de género. La poderosa oposición de los intereses empresariales, la influencia de los legisladores sureños y la percepción social del trabajo de hogar contribuyeron a su exclusión hasta nuestros días. En la actualidad, muchas trabajadoras de hogar están cubiertas por las leyes federales sobre salario mínimo y horas extras. Sin embargo, las trabajadoras de hogar a tiempo parcial siguen excluidas de los derechos plenos al salario mínimo y las trabajadoras de hogar que viven en el hogar donde trabajan no tienen derecho al pago de horas extras de parte de los empleadores que son miembros del hogar.
Ley de Derechos Civiles: las trabajadoras de hogar son generalmente excluidas de las leyes de derechos civiles federales tales como el Título VII de la Ley de Derechos Civiles de 1964, la cual prohíbe la discriminación basada en raza, color, religión, sexo, u origen nacional debido a que la ley solo le aplica a empleadores con 15 empleados o más.
Ley Nacional de Relaciones laborales (NLRA, por sus siglas en inglés): las trabajadoras de hogar están excluidas bajo la NLRA la cual le concede a la mayoría de los trabajadores del sector privado el derecho a participar en negociaciones colectivas y actividades concertadas protegidas para mejorar sus condiciones de trabajo.
Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo (OSHA): las trabajadoras de hogar que son contratadas directamente por hogares particulares no están cubiertas actualmente por las políticas establecidas por la Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo, cuyo objetivo es garantizar unas condiciones de trabajo seguras y saludables para los empleados. La OSHA establece normas de seguridad en el lugar de trabajo y otorga a los trabajadores el derecho a denunciar condiciones peligrosas sin temor a represalias. La OSHA no aborda específicamente los peligros únicos a los que se enfrentan las trabajadoras de hogar en domicilios particulares.
Es importante señalar que, aunque algunas leyes federales ofrecen una protección limitada a las trabajadoras de hogar, la cobertura específica puede verse influida por la escala de tamaño del empleador y otros factores. Además, muchos estados ofrecen mayores protecciones laborales y de empleo que lo que se considera el suelo federal, por lo que los derechos y protecciones de las trabajadoras de hogar pueden variar significativamente en función del estado en el que trabajen.
La diferencia entre una Carta Nacional de Derechos de las Trabajadoras del Hogar y una Carta de Derechos estatal o municipal radica en cuánto abarcan y la jurisdicción a la que le aplica.
Es importante señalar que, si bien una Carta Nacional de Derechos de las Trabajadoras del Hogar establecería una norma federal para los derechos de las trabajadoras de hogar, no impediría que cada estado promulgara protecciones más amplias para su fuerza laboral del hogar. Las leyes estatales pueden ser a menudo ofrecer mayor protección que las federales, pero no pueden otorgar menos derechos que los que se exigen a nivel federal.
En La Alianza, estamos trabajando para que aprueben una Carta Nacional de Derechos de las Trabajadoras del Hogar porque podría crear protecciones constantes y equitativas para las trabajadoras de hogar en todo el país y ayudar a elevar las condiciones y derechos laborales para esta fuerza laboral históricamente marginalizada. También estamos trabajando con la misma intensidad para seguir aprobando cartas de derechos a nivel estatal y municipal, de modo que puedan adaptarse para abordar las necesidades y retos específicos a los que se enfrentan las trabajadoras de hogar en cada estado/ciudad, proporcionar vías adicionales para su aplicación y tener en cuenta las variaciones y prioridades regionales.
Una Carta de Derechos de las Trabajadoras del Hogar representa un paso importante hacia el reconocimiento de las contribuciones de las trabajadoras de hogar y asegurar que estas sean tratadas de manera justa y con dignidad en el lugar de trabajo. Más información acerca de las Cartas de Derechos a nivel estatal y municipal y sobre las protecciones que han sido aprobadas.
También puede obtener más información acerca de nuestra campaña para que aprueben una Carta Nacional de Derechos de las Trabajadoras del Hogar así como también nuestro trabajo actual para aprobar un proyecto de ley en Nueva Jersey y al nivel municipal en Miami como parte de nuestros esfuerzos continuos para asegurar que las trabajadoras de hogar reciban las protecciones que se merecen a nivel federal y local. Involúcrese al tomar las acciones enumeradas a continuación: